'El guateque', el legado de Peter Sellers
(Este artículo està dedicado especialmente a Luis, para que su película favorita le traiga mucha suerte en su nueva andadura)
El 24 de julio se cumplieron 30 años de la muerte de Peter Sellers. A los admiradores de este genial cómico parece que nos dejó hace unos meses, y eso quizás se deba a la frescura que todavía tienen muchas de sus películas. En posteriores comentarios analizaremos las curiosas y extrañas películas de Sellers, con 80 trabajos entre cine y televisión. Pero ahora cabe destacar un clásico, el gran clásico de Peter Sellers: ‘El Guateque’ (The Party).
Todo tipo de calificativos y de elogios merece esta pieza redonda donde se combinan la buena dirección de Blake Edwards, un Sellers más afinado que en otras películas y un buen número de actores y elementos secundarios(el camarero borracho, el director de la película, los actores de Hollywod, la dulce e ingenua actriz francesa, la música, el decorado, el diseño de la casa…)
Y es que hay veces que una película es perfecta pase lo que pase. En ‘The Party’ ocurre. Se dan una serie de circunstancias que la encaminan a ser una de las grandes de la comedia. La fórmula seguro que la intentaron repetir más veces y nunca salió igual. En las secuelas de ‘La Pantera Rosa’ Sellers y Edwards lo probaron,pero no tiene esa naturalidad desbordante, esa brillantez tan alta como en ‘El Guateque’. Lo principal del film, aparte de muchos otros aspectos, es que provoca la risa descontrolada, lo hizo en 1968 y lo consigue en 2010. Además, quien la ha visto y le ha gustado repite, no se cansa de ver los ‘gags bucle’: el ‘pajarito num-num’, la incontinencia urinaria , ‘el baño del elefante’, el soldado que nunca muere y toca sin parar’, ‘el pollo volador o pollo a la diadema’. Su nivel ha subido tanto que asemejan cuadros de un prestigioso museo.
Repetiríamos ‘El Guateque’ y encontraríamos uno y mil detalles nuevos que nos deleiten con más carcajadas.Siempre hay más en este contagioso ‘slapstick’ al que Edwards le dotó de una gran elegancia. Ahora revisamos(y lo revisaríamos mil veces) algunas ‘superguatequistas’ escenas de esta joya que debería ser de obligada visión como terapia para la risa.
El soldado inmortal
‘El Guateque’ no puede empezar mejor. Nos creemos que vamos a ver una película de la época colonialista con una emboscada de los rebeldes, cuando en realidad se trata de una parodia de ‘Gunga Din’.El corneta toca mientras le disparan sin parar. Después de unos segundos,observamos que es un corneta, especial, inmortal, y en unos más se desata la risa. Finalmente el director corta la ‘penosa’ actuación del soldado. Casi 4 minutos que no tienen precio.
Todo tipo de calificativos y de elogios merece esta pieza redonda donde se combinan la buena dirección de Blake Edwards, un Sellers más afinado que en otras películas y un buen número de actores y elementos secundarios(el camarero borracho, el director de la película, los actores de Hollywod, la dulce e ingenua actriz francesa, la música, el decorado, el diseño de la casa…)
Y es que hay veces que una película es perfecta pase lo que pase. En ‘The Party’ ocurre. Se dan una serie de circunstancias que la encaminan a ser una de las grandes de la comedia. La fórmula seguro que la intentaron repetir más veces y nunca salió igual. En las secuelas de ‘La Pantera Rosa’ Sellers y Edwards lo probaron,pero no tiene esa naturalidad desbordante, esa brillantez tan alta como en ‘El Guateque’. Lo principal del film, aparte de muchos otros aspectos, es que provoca la risa descontrolada, lo hizo en 1968 y lo consigue en 2010. Además, quien la ha visto y le ha gustado repite, no se cansa de ver los ‘gags bucle’: el ‘pajarito num-num’, la incontinencia urinaria , ‘el baño del elefante’, el soldado que nunca muere y toca sin parar’, ‘el pollo volador o pollo a la diadema’. Su nivel ha subido tanto que asemejan cuadros de un prestigioso museo.
Repetiríamos ‘El Guateque’ y encontraríamos uno y mil detalles nuevos que nos deleiten con más carcajadas.Siempre hay más en este contagioso ‘slapstick’ al que Edwards le dotó de una gran elegancia. Ahora revisamos(y lo revisaríamos mil veces) algunas ‘superguatequistas’ escenas de esta joya que debería ser de obligada visión como terapia para la risa.
El soldado inmortal
‘El Guateque’ no puede empezar mejor. Nos creemos que vamos a ver una película de la época colonialista con una emboscada de los rebeldes, cuando en realidad se trata de una parodia de ‘Gunga Din’.El corneta toca mientras le disparan sin parar. Después de unos segundos,observamos que es un corneta, especial, inmortal, y en unos más se desata la risa. Finalmente el director corta la ‘penosa’ actuación del soldado. Casi 4 minutos que no tienen precio.
Resumen de algunos buenos gags de la película
La entrada triunfal a la fiesta del actor hindú. Su zapato navega entre las aguas. El actor intenta tirar a la diana y le da a un fornido ‘forastero’ que jugaba al billar. Una versión más doméstica de tiempos modernos con Sellers tocando todos los botones que siembran el caos en la reunión social. ‘Pollo a la diadema’ ,un gran gag considerado todo un clásico de la comedia, con la fantástica actuación de Steve Franken, el camarero borracho. ‘Desastre en la cisterna’, Sellers dispuesto a acabar con el imperio de Hollywood en menos de una hora.
La canción
Nada que perder. Es el título de la canción que interpreta para los magnates de Hollywood Claudine Longet. Sellers aparece todo mojado con la canción empezada y con su vejiga a punto de explotar. Se aguanta como puede mientras el caramelo puro de Longet nos canta en un inglés afrancesado:”Un día quizás no tendremos nada que perder y mucho que ganar ,si el amor decide quedarse no tendremos nada que perder”.
Melosidad en estado puro, sensualidad, un señor haciéndose pis mientras escucha la canción del gran Henry Mancini y todo elaborado con gusto, con elegancia, sin estridencias. ¿Alguien da más?
Melosidad en estado puro, sensualidad, un señor haciéndose pis mientras escucha la canción del gran Henry Mancini y todo elaborado con gusto, con elegancia, sin estridencias. ¿Alguien da más?
El baño del elefante y la espuma final
Y finalizamos el recorrido por las escenas guatequiles (podríamos poner muchas más) con el final. Todo esa mansión, se convierte en una bañera gigante con la fiesta de lavado del elefante. Pop en su más pura definición, final de opereta para despedir la fiesta más divertida de los últimos años. Aquí, en mi opinión cambia un poco el tono de humor, se abandona la sutileza, los gestos, las miradas y se cambia por la apoteosis, una fiesta alocada, todo lo contrario que habían previsto los organizadores de la cena.
Es la noche de la risa y no hay nada más saludable
El guión de Blake era de apenas 60 folios y los actores aportaron ideas en la elaboración de las escenas. Sin saberlo, Sellers dijo una frase que define toda la idiosincrasia de ‘El Guateque’: “Esta es la noche de la risa y no hay nada más saludable”. Más de 40 años después, la risa es su gran valor y ver la película es una recomendación muy saludable.
Enlaces relacionados:
www.imdb.com/title/tt0063415/
www.canaltcm.com/peliculas/el-guateque
www.encadenados.org/n23/la_risa_fundamento.htm
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