viernes, 1 de abril de 2011

ELIZABETH TAYLOR , LA ESTRELLA QUE SUPO SER ACTRIZ (II)















Voluble y exagerada en 'Salvaje y peligrosa' con Michael Caine. 'Identikit', la  mayor rareza de Elizabeth Taylor, en la que interpreta a una mujer desequilibrida y luce un vestuario 'horrible'. Cuatro papeles distintos, uno de ellos el de hada, para Elizabeth Taylor en 'El pájaro azul', película con muchos detractores. 'Il giovanne Toscanini' de Franco Zefirelli,  su último papel protagonista en la gran pantalla. 



Después de un primer repaso a algunas curiosas actuaciones de Elizabeth Taylor (realmente increíble el despliegue informativo que se le ha dado en su despedida, ni ella se lo hubiera imaginado) nos adentramos en una segunda entrega caracterizada por peculiares participaciones de la actriz. 



Nos centraremos en la que podemos denominar etapa postburtoniana (es decir, después de Richard Burton), con alguna que otra excepción. Liz, emprende proyectos arriesgados con resultados muy dispares. Las estrellas se hacen mayores, los papeles cambian y es más complicado ser la primera actriz para producciones de mayor ambición, pero ella estuvo a la altura.

Zee, la mujer despechada



Antes de aventurarse en los más variados argumentos y todavía  bajo el cobijo burtoniano, Elizabeth Taylor protagonizó una película de corte similar a algunas que rodó con el  actor galés. ‘Salvaje y peligrosa’( Salvaje y peligrosa ) trata de la crisis de un matrimonio y los intentos de la voluble y exagerada  Zee Blakeley, interpretada por Elizabeth Taylor, de recuperar a su marido, Michael Caine, que conoce a otra mujer, Susannah York,  la antítesis de ella.



La película, dirigida por Brian G. Hutton, mezcla melodrama, comedia ácida y tiene alguna que otra escena provocativa. Liz mantiene ese pulso interpretativo y conserva la garra de anteriores films, en un papel difícil en el que la exageración la puede llevar al ridículo más espantoso.


Divertidos son los créditos iniciales de la película, en una escena ahora impensable.Nos muestran imágenes a cámara lenta de Michael Caine y  Elizabeth Taylor jugando al ping-pong en una habitación de la casa ( naturalmente, con ropa de calle y sin colocarse el oportuno chándal).



' Una hora en la noche' , la ventana de Elizabeth





Fue él mismo director británico Brian G. Hutton quién buscó a Elizabeth Taylor para que protagonizara el thriller ‘Una hora en la noche’(  Una hora en la noche ) , una pieza teatral  de la guionista Lucille Fletcher, quién fue mujer de Bernard Herman y autora de otro argumento radiado de gran éxito en el cine:’Perdón, número equivocado’, interpretado por Barbara Stanwyck.


Elizabeth Taylor es  Ellen Wheeler,  una mujer que cree haber visto un asesinato a través de su ventana. ¿Realmente ha ocurrido? ¿Ha pasado?. ¿Se está volviendo loca? Todas estás preguntas y otras intrigas con van a centrar la atención de la película. 



Liz Taylor está creíble en su papel de mujer atormentada que sube por la  escalera de la locura. El final,es uno de los mejores momentos de la película, y resulta quizás demasiado inesperado.

‘Identikit’, la gran rareza de Elizabeth Taylor


  
Italia siempre ha sido refugio de estrellas, y algunos grandes actores han protagonizado un film menor en su carrera en el país transalpino. Una mayoría ha escogido films livianos, ligeros para disfrutar del Mediterráneo y ejercer con oficio y sin mucho esfuerzo su papel. 

Liz, en cambio hace lo contrario, elige Roma y Alemania para rodar su mayor rareza: ‘Identikit’( Identikit ,también conocida como 'The driver's seat' . Dirigida por Giusseppe Patroni Griffi, director y guionista especializado en argumentos enrevesados y decadentes.



La trama de la película ya se presenta poco común. Una mujer llamada Lise ,mentalmente desequilibrada,  interpretada por Elizabeth Taylor,   experimenta una serie de encuentros extraños en Roma en busca de alguien que la mate. 


La película, basada en una novela de Muriel Spaak, abrió el festival de Cannes de 1974. Crítica y público le dieron la espalda. Quizás ahora es el momento de revisar esta producción que en el siglo XXI sería impensable.






Liz Taylor se atrevió, incluso a lucir una ropa horrible tal y como indicaba la novela y el guión de la película. 
Quizás nadie estaba mentalizado para ver a la actriz  en una película de un estilo muy diferente que  supera algunas rarezas de Richard Burton. Ni siquiera el controvertido y polifacético artista  Andy Warhol,  que tiene un papel como diplomático corrupto, se esperaba ver a Liz en esta curiosa producción.  

‘El pájaro azul’, o cuando Liz se convierte en hada



 
Alguna comedia, el histórico, drama, películas infantiles con ‘Lassie’ pero nunca se había metido de lleno en el terreno de la fantasía. Esa tal vez pudo ser la razón de aceptar el proyecto para llevar a la pantalla la quinta versión de ‘El pájaro azul’ ( El pájaro azul ),  primera coproducción entre Rusia y Estados Unidos.

La película, 35 años después de su estreno, genera división de opiniones. Para unos es un interesante cuento infantil, para otros un guiso difícil de digerir y  tan mala que provoca la risa sin forzar.


Su visionado no es fácil, el ritmo es lento  y el viaje de los niños por diversos lugares en busca del pájaro azul parece una ruta por Disneyworld.   Elizabeth Taylor interpreta  4 papeles:  El  del hada la Reina de la Luz, la madre, la bruja y el amor materno.


Algunas escenas realmente no tienen desperdicio, como la visita al lugar de los niños en espera de nacer.


La reunión de los lujos, con un estupendo papel para Ava Gardner,  con 54 años cuando rodó el film.


Por uno u otro motivo, merece la pena ver esta remake de una película de los años 40 de Shirley Temple. Quizás lo que más llama la atención del film es el resultado tan decepcionante de un sacrificado proyecto (no era fácil una coproducción ruso-americana) que se complicó por momentos. En España cuando se estrenó tuvo una fría acogida y no superó los 120 mil espectadores.

Liz Taylor la soprano enamorada de Toscanini



Elizabeth Taylor deja el cine en 1980 y  se refugia en la televisión con participación en series y películas para la pequeña pantalla. Una propuesta de Franco Zefirelli, con quién trabajó en la comedia ‘La mujer indomable’, la convenció para volver  8 años después. Las relaciones del compositor Toscanini con la diva de la ópera Nadina Bulichoff, interpretada por Liz Taylor, centra la trama de la película ‘El joven Toscanini’ ( Il giovane Toscanini).

  
Cuidada con el esmero que pone Zefirelli en sus trabajos, flojea en un débil argumento. La reaparición de Liz en la gran pantalla  no obtuvo una buena respuesta popular. Y ya prácticamente abandonó el cine. Volvió de nuevo a sus series y películas.



 Una breve aparición en la versión cinematográfica de ‘Los Picapiedra’ ( The Flintstones: Los Picapiedra ) en 1994 fue su última presencia en la gran pantalla. 


Desde 1942 hasta 1994 (2001 si contamos sus trabajos televisivos) estuvo Elizabeth Taylor demostrando en cada película su esfuerzo y dedicación. 70 títulos, diversas etapas, papeles muy diferentes…



A todos se nos ha quedado en la retina  su belleza, pero ella demostró (como decimos en nuestro título) que fue una estrella que supo ser actriz. Nuestro mejor homenaje es revisar su rico legado cinematográfico y descubrir muchas de las facetas de Elizabeth Taylor que estaban más ocultas o habían pasado desapercibidas.

Enlaces relacionados:  http://www.corbella.de/archives/1047-1972-Salvaje-y-peligrosa-del-director-Brian-G.-Hutton..html

 http://www.dangerousminds.net/comments/elizabeth_taylors_craziest_role_ever_the_drivers_seat_aka_identikit/

http://movies.nytimes.com/movie/review?res=9E03E7D7103DE336A05757C1A9639C946790D6CF





jueves, 24 de marzo de 2011

ELIZABETH TAYLOR, LA ESTRELLA QUE SUPO SER ACTRIZ (I)












Entre los años 60 y 70 protagonizó muy pocas comedias. 'La mujer indomable',  Elizabeth Taylor y Richard Burton en una adaptación de la obra de Shakespeare. 'Se divorcia él, se divorcia ella', último trabajo del tándem Burton-Taylor. Elizabeth Taylor participa en la película musical  'A little night music' y canta el clásico 'Send in the clowns'.



Como siempre, hemos de esperar al fallecimiento de un actor, actriz , director, etc para recordar su esplendoroso pasado, sus grandes momentos y toda su estupenda aportación. Mientras su corazón palpita, el “viaje a lo mejor” está sellado y solamente se abre cuando el homenajeado no está presente en este mundo.


Así son las reglas del espectáculo y de la información. Ahora le ha tocado el turno a una grande, a una estrella, Elizabeth Taylor. La filmografía de Liz es variopinta y muy curiosa, extraña en algunos momentos, y , vista desde la distancia en el tiempo,  increíble para toda  una estrella.

 Elizabeth Taylor y el desodorante del éxito


Suponemos que nuestros ávidos lectores ya se sabrán muchas de las películas más destacadas de Elizabeth Taylor (‘Gigante’, ‘La mujer marcada’, ‘Cleopatra’, ‘¿Quién teme a Virginia Woolf?’La gata sobre el tejado de zinc’), sus dos Óscars; la barbaridad de dinero que cobró por ese macroproyecto que fue Cleopatra (una cifra cercana a los 46 millones de euros actuales). Su tormentosa relación amor-odio con Richard Burton, con quién protagonizó 12 películas  entre la década de los 60 y los años 70. Su famosa frase:’El éxito es un gran desodorante que borra todo el pasado’.


Especializada en adaptaciones teatrales y dramas
Los que nos han leído artículos anteriores sobre famosos que nos dijeron adiós, saben que nos gusta indagar en algunas películas, no necesariamente las más exitosas, porque nos llaman la atención de alguna manera, y es lo que pretendemos en este modesto homenaje a Liz Taylor que ofrecemos desde 'El primo de Marty Feldman'.



70 títulos, entre cine y televisión contempla su carrera, destacada sobre todo a finales de los 50 y los 60. Después de Cleopatra ( esa película que parecía que nunca se terminaba de rodar), Liz apuesta por papeles más personales, por conflictos menos épicos y más humanos. En los 60 apenas se deja ver en alguna  comedia, prefiere los  dramas, las relaciones turbulentas de pareja, o densas adaptaciones teatrales llevadas a la pantalla. 

Liz Taylor es Katharina 'La mujer indomable' adaptación de la obra de Shakespeare


Una excepción fue la comedia ‘La mujer indomable’( La mujer indomable) , versión de la obra de Shakespeare, con Richard Burton. Hasta 1973 todas las películas después de Cleopatra excepto  4,  las rodó con su ‘gran amor’ Richard Burton. Dino de  Laurentiis produjo una cuidadosa adaptación con Franco Zefirelli como director.

Elizabeth Taylor asume a la perfección  su papel  de Katharina‘la fierecilla’ de mal carácter y Richard Burton ‘borda’ su actuación como Petruchio. Ellos están rodeados de un buen elenco formado por Cyril Cusack, Michael York, o Michael Hordern.



Una buena ocasión para ver a Burton y a Liz enamorados ’, sin  esas relaciones tan tortuosas ni dramáticas que manifiestan en otros trabajos. 



El amor de Liz Taylor por Richard Burton es tal que la película ‘El único juego de la ciudad’( El único juego de la ciudad ) , cuya acción transcurre en Las Vegas, se ha de rodar en París, por expreso deseo de Elizabeth Taylor, quién no quería separarse de Burton (el actor participaba en la película ‘La escalera’ de Stanley Donen).

Burton-Taylor, un fructífero tándem


 

Cinco años más tarde, el tándem Burton-Taylor se atreve con una obra lírica del dramaturgo galés Dylan Thomas, ‘ Bajo el bosque lácteo’( Bajo el bosque lácteo ) , ambientada en un pueblo galés de pescadores.




Participa Peter O’toole, quién interpreta al Capitán Cat,  en esta extraña adaptación llena de excentricidades ( el pueblo en el que transcurre la trama se llama Llaregub, que leído al revés en inglés significa iros todos al carajo). Como curiosidad, aparece en esta película la actriz Glynis Jones,  quién 8 años antes interpretó a la señora Banks en ‘Mary Poppins’.




'Se divorcia él, se divorcia ella', último trabajo Burton Taylor




La tormentosa relación entre Liz Taylor y Richard Burton tuvo su testamento en una película para la televisión. ‘Se divorcia él, se divorcia ella’ ( Divorce His - Divorce Hers). Es la historia de la crisis de un matrimonio que lleva 18 años casado. El relato de la pareja que se desmorona está dividido en dos partes:el punto de vista del marido y el de la esposa. La película dura tres horas, excesivo metraje, y en ella se puede apreciar la pasión de Elizabeth Taylor por las joyas.



Aparte de ver a la pareja juntos por última vez, su interés radica en que de alguna forma, la historia de los personajes que interpretan coincide en su vida real. Liz y Richard se divorciaron poco después. (más tarde se volvieron a casar, pero el segundo matrimonio apenas duró un año).

Elizabeth Taylor canta 'Send in the clowns'




Dicen los críticos que tras la ruptura con Burton los trabajos de Elizabeth Taylor pierden interés. Quizá no sea así, pero la verdad sus aportaciones fílmicas se convierten en más irregulares e incluso extravagantes.




Nadie se iba a pensar, por ejemplo, que con 45 años, Liz se atreviera con un musical. Y así lo hizo en su participación en ‘A Little Night Music’( A Little Night Music ) , el musical inspirado en ‘El sueño de una noche de verano’ de Ingmar Bergman. Ella interpreta a  Desirée Armfeldt y canta el clásico tema de Stephen SondheimSend in the  clowns’.


Taylor entona el  tema en el que el personaje reflexiona sobre su vida. Liz interpreta una de las versiones más sorpresivas de esta canción que se ha escuchado a través de grandes de la música como Sinatra, Barbra Streisand, Shirley Bassey , Howard Keel, o Bing Crosby. Hay también una versión del cantante español Raphael.




Su participación en una película musical, todo un clásico en la escena de Broadway y representado en muchos países , nos sirve para cerrar esta primera entrega de una grande como Liz Taylor. En la segunda parte veremos algunas rarezas y más curiosidades de esta diva de la historia del cine: Elizabeth Taylor, toda una estrella, una belleza, y una buena actriz que quiso moverse por aguas poco tranquilas.


Enlaces relacionados:  
                                  http://divasdelcine.blogspot.com/2010/10/liz-taylor_24.html

                           
                                  http://www.elpais.com/articulo/cultura/Fallece/actriz/Elizabeth/Taylor/79/anos/elpepucul/20110323elpepucul_8/Tes

                        http://www.abc.es/20110323/cultura-cine/abcm-gata-sobre-tejado-cine-201103231348.html

viernes, 18 de marzo de 2011

BARBRA STREISAND, 'ON A CLEAR DAY' : LA OBERTURA A LA PRIMAVERA







'Vuelve a mi lado',  el musical de Minnelli,  un canto a la armonía y a la vitalidad. Barbra Streisand recuerda su vida pasada ante Yves Montand. Daisy Gamble, la joven que hace crecer las flores de manera extraordinaria. La canción 'On a Clear Day' de Alain Jay Lerner y Bruce Lane, se ha convertido en un clásico con todo tipo de versiones.


Alcanzamos la primavera, la estación del ‘estallido’ de los sentidos. La etimología del latín significaría ‘Ver Primum’, que no es ver a ningún primo, sino la estación previa al verano. La primavera proporciona mayor vitalidad, mayor energía, mayor ánimo, son los efectos psicológicos positivos que no hay que desaprovechar.




Dos elementos nos han decantado por elegir la película ‘Vuelve a mi lado’ ( Vuelve a mi lado ) de Barbra Streisand como nuestra obertura a la estación de la alegría. La fuerza de una canción (toda una oda al buen estado de ánimo). El tema principal lleva el mismo título de la película y de la obra de Broadway: ‘On a clear day  you can see forever’ (‘En un día claro puedes ver para siempre’). El segundo factor es una estupenda escena floral de la película en la que se aprecia una de las facultades de la protagonista, Daisy Gamble.

De Broadway al cine con el encanto, la voz y la personalidad de Barbra Streisand




En unas líneas revisaremos los dos grandes componentes de este musical, el penúltimo de los 38 títulos que rodó  el director Vicente Minnelli ( todo un grande en el género con títulos como ‘Gigi’, Un americano en París’ o ‘Brigadoon’).

 ‘Vuelve a mi lado’ es una versión cinematogràfica del  musical de Broadway. Barbra Streisand, en pleno apogeo por su meteórica carrera musical y sus inicios cinematográficos (venía de rodar ‘Funny Girl’ y ‘Hello Dolly’) se embarca en su tercer musical, en una época difícil para el género: 1970.

Barbra es elegida para encarnar a Daisy Gamble en detrimento de la actriz Barbara Harris, quién lo interpretó en Broadway. 



Le acompaña el cantante y actor francés Yves Montand. Montand ya había actuado en otra películas norteamericanas junto a Marilyn Monroe en ‘El multimillonario’. También compartió cartel con Shirley MacLaine o Ingrid Bergman.

El argumento de ‘Vuelve a mi lado’asemeja surrealista cuando se cuenta en unas líneas.(Fue uno de los puntos débiles de la película y por ahí le llovieron las críticas).  Barbra Streisand es una joven con dotes de clarividencia que fuma en exceso. Su estricto prometido le aconseja que acuda al psiquiatra, doctor Marc Chabot (Yves Montand) para dejar su adicción al tabaco.  Por medio de la hipnosis, el especialista descubre una vida anterior, ella es la reencarnación de Melinda Winifred, una mujer que vivió en la Inglaterra del XIX y se casó con un noble inglés.



Las sesiones de hipnosis descubren el pasado de Daisy e incrementan la relación entre ella y el psiquiatra. El amor unirá sus corazones (aunque Montand tuviera 21 añitos más que Barbra Streisand cuando se filmó la película)






‘My fair lady’ y ‘Vuelve a mi lado’, el juego de las coincidencias





No vamos a extendernos, pero existen algunas coincidencias entre esta película y todo un clásico del musical: ‘My fair lady’ ( My Fair Lady). El guión es del mismo, Alain Jay Lerner, y la diferencia de edad entre los actores protagonistas Audrey Hepburn y Rex Harrison es idéntica: 21 años.



Las dos tratan sobre la relación de un experto (un profesor y un psiquiatra) con una joven de otro ámbito que acabarán enamorándose .Audrey Hepburn es una vendedora de flores, Barbra Streisand mantiene una relación muy personal con las flores.






¿Se inspiró Lerner en algunos aspectos de su propia idea para crear una nueva historia en ‘Vuelve a mi lado’? Todo indica que sí y además hay ciertos detalles en los que Lerner propone como un ‘ritual’ de retorno a ‘My fair lady’. Lerner utiliza  en la película  un lenguaje repleto de guiños e incluso de toques supersticiosos, que  sólo es identificable para los allegados o  los muy avezados.

Barbra Streisand o la facilidad para hacer crecer las flores




El primer gran elemento primaveral de la película es la facilidad de la protagonista para hacer crecer las flores. La voz de Barbra Streisand multiplica el brote. Los tulipanes, los jacintos no se resisten a tan sensual estímulo y florecen fuertes y robustas, mostrando su total plenitud y elegancia. Un canto a la primavera desde su esencia más pura : rodeada de flores.









‘On a clear day  you can see forever’, el canto que llena de vitalidad y optimismo



Si la película de Minnelli no es redonda, aunque es de bella factura y significa el último proyecto del diseñador de vestuario Sir Cecil Beaton, una canción, 'On a clear day you can see forever' , ha traspasado fronteras, tiempo, y ha alcanzado la categoría de los clásicos. Como comparten algunos de los amantes de la letra y de la música, tiene ese toque que te pone de buen humor, te proporciona alegría, eleva el estado de ánimo. En pocas palabras:  está en los altares.



Barbra Streisand interpreta de nuevo el tema al final , con esa tremenda fuerza, impetu (la cantante tenía 28 años cuando rodó la película) que nos deja con ganas de volverlo a escuchar.




El guión, como hemos comentado anteriormente,  fue escrito  por Alain Jay Lerner,autor de Brigadoon, ‘Gigi’, la anteriormente referida 'My fair lady'  y un sinfin de éxitos. Lerner  también ha sido letrista  y compositor de bandas sonoras. La música es de  Bruce Lane, popular por ‘El Valle del Arco Iris’,entre otros.


Su colaboración en la pieza de Broadway, que luego fue llevada al cine, alcanza la cima con este tema. A veces pasa, no se sabe por qué motivo, se unen melodía, interpretación, letra y se consigue un pleno acierto en el corazón musical de los espectadores.



Para ello nada mejor que hacer la prueba. La canción figura como un clásico en el repertorio de muchos grandes, Sinatra, Andy Williams, Sarah Vaughan, Johnny Mathis... El jazz ha elaborado brillantes versiones de este gran tema, canto a la vitalidad por excelencia.


Interpretaciones de todas las clases y de todos los estilos engrandecen el tema. Resulta curioso escucharlo de distinta manera porque todas quieren añadir algo a la versión original:  Las orquestas, o los solistas.


Antes de oir  nuevas versiones que nos ayuden a degustar más esta joya, apreciamos también la letra
de ‘En un día claro puedes ver para siempre’.  ¡Que bonito!  (Es una traducción libre, un poco cambiada y floral).   Que la primavera os traiga el mejor de los deseos.


En un día claro
Levántate y mira a tu alrededor
Y verás quién eres
En un día claro
Cómo te sorprenderán
Ese brillo de tu ser
Eclipsa todas las estrellas
Te sentirás parte de todos los mares de la  montaña y de la costa
Puedes oír
De cerca y de lejos
Una palabra que  nunca, nunca has  escuchado antes ...
Y en un día despejado
Ese día, claro
Puedes ver para  siempre, y siempre y cada vez más






Enlaces relacionados: http://musicadejazz.blogspot.com/2009_10_01_archive.html

                                    http://www.barbrastreisand.com/au/node/4490
                                   
                                    http://love4musicals.com/2011/03/15/on-a-clear-day-you-can-see-forever/

                                      

jueves, 10 de marzo de 2011

DORIS DAY, ESPÍA, SIRENA Y ENAMORADA









‘Una sirena sospechosa’, comedia romántica y alocada con Rod Taylor. Dom DeLuise se dio a conocer en su papel de espía novato. Doris Day es una viuda de la que sospechan que es espía en un festival lleno de equívocos. Secundarios de la serie ‘Embrujada’ participan en la comedia de los 60.


Después de dedicar nuestro anterior artículo a tres actrices, esta semana vamos a prestar atención a una película y a su actriz protagonista. Lo hacemos gracias a una sugerencia de uno de nuestros lectores, que nos ha ayudado a descubrir (ella ya lo sabía, por supuesto) el encanto y ese buen sabor de boca que deja este film de los 60.



La actriz, criticada por muchos por representar a la americana de clase media de la época, es Doris Day. Llenar los cines Oklahoma puede ser fácil si es la americana media, pero conseguirlo en Majadahonda es más complicado y Doris atrajo a los espectadores de medio mundo.



Doris llevaba desde los 50 con películas en las que tenían cabida el fino humor y el amor. Los guiones la emparejaron con Rock Hudson ( sólo hicieron tres películas aunque parezcan más) Frank Sinatra, Cary Grant, Clark Gable, David Niven,  Richard Widmark, James Cagney,  o James Garner. 


Con el actor australiano Rod Taylor compartió protagonismo en dos películas ‘Do not disturb’ y ‘The Glass Bottom Boat’(algo así como ‘El barco con fondo de cristal), cuya traducción al castellano no se parece en nada. ('  Una sirena sospechosa ' ).


Tashlin y Doris Day, humor y romanticismo en elevadas dosis





Doris jugaba en casa. Su marido, Martin Melcher, era el productor, y tenía todo a favor para lucirse.en  'Una sirena sospechosa'.  Era la película 14 que producía para su esposa.  En esta ocasión, en plena moda Bond, la comedia tenía un toque de espías un poco casero. Después contrataron a un director especializado  en comedias más alocadas: Frank Tashlin

Acostumbrado a llevar a la pantalla todas las peripecias de Jerry Lewis, Tashlin tenía que combinar los momentos más románticos (los besos de Rod y Doris, por cierto Rod era algunos años más joven que ella) con los instantes dedicados a la carcajada. 

Para ello no repararon en buscar un buen combinado de actores cómicos entre los que destaca un joven Dom DeLuise, y repartirlos a través de los 110 minutos de metraje. Resultado: la película pasa volando.


A ello se le añade excelente fotografía, decorado, vestuario y buen apoyo musical (estupendos arreglos de Frank De Vol)  y se nos queda una de esas películas ideales para ‘refrescarnos’ la mente, para saborear el lado bueno de la vida. Nuestra lectora y amiga ya sabía lo que nos ofrecía. 


El desencuentro entre Jennifer Nelson y Bruce Templeton trae el amor





El gran amor para las historias del cine surge de desencuentros. Y aquí no iba a ser menos. Jeniffer Nelson (Doris Day)  es una viuda que conoce a Bruce Templeton (Rod Taylor) quién después será su gran amor. Para ello necesita empezar con mal pie. Templeton le ‘pesca’ la pieza inferior de su vestido de sirena, y luego no le puede quitar el zapato de tacón en el área restrictiva de la Nasa.


Levanta sospechas porque  telefonea a su perro Vladimir

Cuando Doris Day y Rod Taylor empiezan a conocerse por motivos laborales, ella levanta las sospechas del jefe de seguridad, Homer Cripps, interpretado por Paul Lynde  ( el tío Arthur de la serie ‘Embrujada’). 

Tampoco resulta muy frecuente que una viuda telefonee a su perro, que se llama Vladimir, para que se mueva por la casa y así haga un poco de ejercicio.


Dom DeLuise un espía en prácticas





  Al amor de la pareja se interpone esa futura sospecha de espionaje y una red de infiltrados ‘por correspondencia’ que encabeza un inspirado Dom DeLuise. Aquí encarna a Julius Pritter, un papel que le dio a conocer como cómico. 

Su primer encuentro con Doris Day es más propio del cine mudo. El ‘falso’ instalador le pisa el pastel a Jeniffer Nelson. A partir de ahí, cada solución es un inconveniente añadido, y un puro ‘slapstick’




El espía ‘patoso’ deja su información en una caseta de feria. Los tiros por doquier casi anulan  al otro agente que ha de recoger los datos.



El festival de los equívocos. Doris besa a quién no toca



La película no gozó en su momento de muy buenas críticas. Quizás por no entender esta combinación de humor y romanticismo. La ‘sirena’, Doris, se encuentra en un momento de la película rodeada de equívocos y malentendidos. En realidad, nadie se piensa que es una simple viuda trabajadora.
Ella prepara un momento sublime de pasión con Bruce Templeton, pero , al apagar la luz , besa al hombre equívocado.






Cuando descubre las acusaciones contra ella, prepara otro encuentro de equívocos entre dos hombres que la cortejan.




El canapé espía 




Entre tanto enredo y movimiento, el agente  en prácticas Julius Pritter tiene tiempo para colocar un canapé espía en la fiesta. Un ingenio que le sirve para bien poco, y  que además debe  vigilarlo muy de cerca para que no se lo coma nadie.


Demasiados espías para una plácida conversación

En el tramo final, la película coge ritmo a base ‘nudos de marinero’ que se van liando. Doris Day se dirige a su casa, digiere el ataque de Dom DeLuise, que la amenaza con una pistola de agua.



 En esos momentos llega el padre de todos los embrollos, Edgar Hill (interpretado por Eric Fleming), quién se había hecho pasar por un agente de la CÍA. La persecución acaba en casa de los vecinos, interpretados por  George Tobías y Alice Pearce ( son los mismos que encarnaban al  matrimonio Kravitz en la serie  ‘Embrujada’).  Alice Pearce murió un 3 de marzo de hace 45 años, meses antes del estreno de ‘Una sirena sospechosa’ en los cines.

Entrada con buen pie en casa del matrimonio de ‘Embrujada’


El pie de Doris Day aparece por la ventana de los vecinos, y provoca el pánico en Alice Pearce. El marido, ni se inmuta. La persecución por la casa acaba con el espía neutralizado en el dormitorio.


Superados todos los equívocos y todos los impedimentos,  Bruce Templeton y Jennifer emprenden una nueva vida juntos. 


'Caprice', la película de la que reniega Doris Day



Un año más tarde Doris Day, el director Frank Tashlin y el marido de Doris, el productor  Martin Melcher quisieron repetir la fórmula con la película ‘Caprice’ ( Capricho ), ambientada en París (¿por qué la mayoría de películas de espías suceden en la capital francesa?). 

Ni el argumento, ni el reparto (Richard Harris es el protagonista masculino) contribuyeron al éxito del proyecto. La propia Doris Day reniega de esta película y reconoce que es una de sus peores interpretaciones. 


Quizás a ‘Caprice’  le faltó un elenco de buenos cómicos y ese tono de comedia más doméstica que consiguieron en ‘Una sirena sospechosa’. A pesar de las críticas y sus defectos  ‘Una sirena sospechosa’,  la película de Doris Day y Rod Taylor,  crece con el paso de los años. Por algo será, será….



                                 http://www.dorisday.net/the_glass_bottom_boat.html